Octubre 2008

Siguiendo huellas de tapires de montaña a través de un paisaje surrealista en Cabeceras Cofanes-Chingual atraviesa pastizales andinos (páramos), el místico bosque nublado, hasta las tierras bajas del Amazonas. Este esfuerzo de conservación propuesto protege el último gradiente altitudinal intacto de 650 m a 4100 m, creando un corredor de más de 550000 hectáreas conectando la Reserva Ecológica Cayambe-Coca con tierra ancestral Cofán, y protege recursos hídricos para los habitantes y el bosque diverso.

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Los arroyos aquí alimentan el sistema fluvial Aguarico-Napo, importante para el oeste de la Amazonía. Cofanes y Chingual que forman el Aguarico, son unos de los últimos ríos de montaña no fragmentados en Ecuador. Su hábitat es crucial biota acuática y los bosques modulan y filtran el agua para uso humano. La variación altitudinal permite diversidad y especialización de especies donde tapires, osos, guacamayos y otras especies vagan en busca de alimento y pueden migrar en respuesta al cambio climático.

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La historia humana en el área abarca miles de años y ha dejado una fuerte huella en el medio ambiente. La rápida deforestación, prácticas agrícolas y minería insostenible están ponen en peligro la naturaleza y los humanos. Habitantes de Sucumbíos, Carchi e Imbabura unieron esfuerzos para proteger este espectacular paisaje.